Sumario Semana del 22 al 28 de Abril de 2024. Edición 17.

Economía - Sostenibilidad

Fuente: UCACYL-VA/ Norte de Castilla 31 de Octubre de 2016

A dos meses de Navidad, las reservas de casas rurales para esas fechas ya alcanzan el 90%.

Buenas temperaturas y un puente largo –el de Todos los Santos– forman un cóctel propicio para la hostelería vallisoletana. Así lo asegura Luis Chico, presidente de la Federación de Asociaciones Castellanas y Leonesas de Turismo Rural y de Valladolid Rural.

«A esos dos factores hay que sumar que ya empezamos con las reuniones de familias y amigos de cara a la imposibilidad de encontrarse en Navidad», explica Chico, quien cifra en torno al 90% la ocupación de los alojamientos rurales de la provincia.

«Son importantes, sobre todo, los colectivos que pueden cogerse el lunes libre y que atraen a muchas personas de otros lugares de la Comunidad hacia Valladolid, que actúa como punto de encuentro», expone. Y es que los datos de reservas para la noche del lunes al martes se sitúan en una cifra algo inferior, aunque considerable: el 60%.

Un puente turístico

Noticias positivas que se extienden al resto del territorio. «En Castilla y León, los números que se barajan son parejos, aunque los volúmenes son distintos porque no todas las provincias cuentan con el mismo número de establecimientos», relata. Son 192 las casas rurales y, aproximadamente, treinta los hoteles rurales con los que cuenta Valladolid.

«Esto no ocurre otros años. Estamos recuperando el ritmo que teníamos antes de la crisis», apunta Chico, quien revela que, a dos meses de las fiestas navideñas, las reservas para Nochevieja y Nochebuena rondan el 90%.

Unos números que, para el presidente de los hosteleros rurales, no responden al azar, sino a la «mayor profesionalización» del sector. «Lo tenemos lleno porque, en épocas malas, hemos mantenido una actitud de trabajo y sacrificio. Si lo dejas, se pierde. Por eso es importante seguir quejándose, como en el tema de los establecimientos ilegales, que nos hacen polvo», concluye.

Seminci, una inversión

En la capital, las expectativas también son buenas, aunque con cifras más humildes. «Las previsiones de ocupación son importantes, pero no tanto como en puentes más turísticos», señala Francisco de Frutos, presidente de la Asociación Hoteles Valladolid, quien calcula que superará el 70%.

el tiempo ayuda

Sol y máximas de 20 grados para cerrar un mes cálido

El sol continuará brillando con fuerza los próximos días y dejará máximas diurnas por encima de los veinte grados durante todo el puente de los Santos. Y así, con temperaturas muy superiores a las habituales para la época, concluirá un mes de octubre cálido y relativamente húmedo, pero no lo suficiente como para paliar el déficit de lluvias que arrastra Valladolid desde julio. Este octubre, al menos, se rozará la media habitual de precipitaciones para el mes, con 49,6 litros recogidos en nueve jornadas -especialmente los días 12 (13,2 litros), 13 (14,4), 23 (10,2) y 24 (7,6)-, cuando lo normal son 55. Eso después de tres meses más que secos, como fueron julio (8,6 litros), agosto y septiembre (12,4), que dejan un balance de 70,6 litros en cuatro meses, muy por debajo de la media habitual, de 115.

Y así, sin más precipitaciones, se prevé que concluya este mes si se cumplen las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que prevén cielo despejados, máximas de veinte grados y mínimas fresquitas, de entre 5 y 8 grados, hasta el martes. Después caerán las máximas y crece la probabilidad de lluvias.

Octubre, en cualquier caso, concluirá como uno de los más cálidos de los últimos años, con una temperatura media hasta ayer cercana a los 15 grados y una media de las máximas de 21, es decir, ligeramente por debajo del octubre más caluroso registrado, el de 2014 (16,7 grados de media y 22,8 para las máximas). Los 24,6 grados registrados el jueves, eso sí, superaron hasta en seis grados lo habitual para la época.

Buenas expectativas en un mal periodo: «Octubre es el primer mes de los últimos 18 en el que la ocupación va a ser inferior que el año anterior. La fiesta del Pilar, que cayó en martes, nos ha afectado mucho», expone mientras reitera que «colocar festivos a mitad de semana es un error».

Otro soplo de aire es el que ha traído la Semana Internacional del Cine, aunque De Frutos avisa: el festival es una inversión a largo plazo. «Tiene mucho más impacto indirecto que directo, gente que viene durante todo el año por haber conocido la ciudad estos días».

Con él coincide Jaime Fernández, presidente de la Asociación Profesional de Hostelería de Valladolid. «Es un reflujo para que se queden. Y también lo ha notado la restauración, sobre todo los negocios cercanos a las salas de cine», comenta.