Sumario Semana del 22 al 28 de Abril de 2024. Edición 17.

CC. Salud - Alimentaria

Fuente: UCACYL-LE / Diario de León 30 de Julio de 2015

Terapia celular para paliar el ictus.

La terapia lipídica constituye una nueva línea de investigación para obtener posibles fármacos contra el ictus. En el Instituto de Biomedicina de León, el grupo de investigación en Neurobiología, que dirige el doctor Arsenio Fernández López, ha logrado nueva financiación para analizar cómo actúa esta terapia sobre los procesos celulares y moleculares del ictus.

Las moléculas que analiza este grupo modifican el entorno lipídico de las membranas y la respuesta celular. Los resultados por el momento muestran un efecto neuroprotector y podrían tener un efecto paliativo sobre las consecuencias invalidantes de un ictus. Si los resultados son aplicables a humanos las moléculas que estudian podrían patentarse como base de nuevos medicamentos.

Actualmente no existen medicamentos paliativos del ictus, y mucho menos regenerativos. Existen algunos tratamiento de urgencia que, si el paciente llega a tiempo al hospital, permiten eliminar el trombo causante de la mayoría de los ictus. Estos tratamientos, mecánicos o farmacológicos, se llevan a cabo en la unidad de Ictus del Hospital de León y el tiempo de llegada del paciente al hospital es crucial para su posible supervivencia o recuperación.

El equipo de investigación leonés, cuyo núcleo está en el área de Biología Celular de la ULE, abrió la línea de investigación del ictus en 2008 y desde entonces centra sus investigaciones en este problema de salud que en los países industrializados es la primera causa de muerte en mujeres y la segunda en varones.

Una de las actuaciones que ha llevado a cabo este grupo es el establecimiento de un puente entre la investigación y la divulgación con la creación de una web dedicada al ictus con datos epidemiológicos, información sobre factores de riesgo, síntomas de un accidente cerebrovascular, algunos consejos para prevenir el ictus y ensayos clínicos.

En España ocurren entre 120.000 y 130.000 casos cada año y más de la mitad de los pacientes quedan discapacitados o fallecen. El ictus es la primera causa de invalidez permanente en adultos y la segunda causa de demencia (http://neurobio.unileon.es/ictus).

Los datos tienen la suficiente entidad para que gobiernos, empresas farmacéuticas y equipos de investigación empleen sus recursos y conocimiento en intentar atajar las consecuencias del ictus. Pese a los difíciles tiempos, el grupo de investigación leonés ha conseguido financiación para dos proyectos dentro de los programas de Retos Sociales y Retos de Colaboración del Mineco (Ministerio de Economía y Cooperación) que sigue las prioridades de investigación y se cofinancia con el programa europeo Horizonte 2020.

Estos programas permiten la colaboración entre empresas y entidades de investigación. En el proyecto de Retos Sociales se ha establecido un consorcio de investigación entre la Universidad de León, la Universidad de Mallorca, Praxis Pharmaceutical y Lipopharma SL, la empresa que lidera el proyecto. «Hasta ahora, no hay ninguna molécula que haya pasado los ensayos clínicos como paliativo del ictus. Esperamos que los fármacos que estamos probando puedan hacerlo », explica el doctor Fernández López.

Los ensayos están aún en la fase preclínica, en modelos animales y aún lejos de los ensayos clínicos, que podrían permitir su aplicación en humanos en las condiciones de seguridad que establece la Agencias del Medicamento Europea (EMA) o su equivalente americana, la FDA. «La obtención de un fármaco es un proceso complicado y muy caro. Las expectativas de las moléculas que estamos probando son prometedoras, aunque solamente una de cada diez mil moléculas llega a convertirse en fármaco», admite el director del grupo de Neurobiología.

Los ensayos de laboratorio pretenden analizar el efecto neuroprotector de determinadas moléculas que, de confirmarse, podrían ser patentables. El grupo trabaja en modelos experimentales de ictus tanto ex vivo como in vivo, que además proporcionan datos conductuales y datos de aplicación clínica. El modelo que más se utiliza es la isquemia cerebral focal que reproduce el ictus más frecuente en humanos, que es aproximadamente el 60% de los accidentes cerebrovasculares que se registran.

Otra de las fuentes de financiación del grupo de Neurobiología en el programa Retos de Colaboración se realiza en un proyecto conjunto sobre el ictus con el grupo de los doctores Pablo Escribá y Xavier Busquets, de la Universidad de las Islas Baleares. Estas colaboraciones enriquecen enormemente la investigación y proporcionan una mayor capacidad de estudio.

Algunos miembros de la unidad del Ictus del Hospital de León colaboran en los proyectos del grupo de Neurobiología. A lo largo de este año este grupo ya ha publicado dos artículos en las revistas especializadas Neuroscience y Neuropathology and Applied Neurobiology y ha enviado otros dos artículos científicos sobre el tema. Además, los estudiantes de doctorado del grupo de investigación presentarán los resultados más recientes del grupo en el congreso de la Society for Neuroscience que se celebrará en octubre en Chicago.