Sumario Semana del 22 al 28 de Abril de 2024. Edición 17.

Consumo - Mercado

Fuente: UCACYL-LE / Diario de León 22 de Septiembre de 2017

La estafa de la carne adulterada se salda con penas de cárcel sustituidas por multas.

Nueve personas condenadas por cometer un delito contra la salud pública, juzgados por comerciar con carne adulterada, evitarán las penas de prisión a las que fueron condenados por el Juzgado de lo Penal número 1 de los de León a cambio de satisfacer multas que comportan la suspensión de sus condenas, de acuerdo al fallo que ha hecho público la sala y que fija sanciones económicas que oscilan entre los 1.800 a los 4.000 euros, dependiendo de la gravedad de las penas.

Ocho de los nueve procesados aceptaron en el juicio una sentencia de conformidad para conseguir una rebaja sustancial en las penas. El noveno, que decidió que se celebrase la vista oral, fue condenado a una pena de seis meses de prisión.

El apartado de hechos probados de la sentencia, que obra en poder de este periódico y está fechada a mediados de julio, da por demostrado que en fecha 2 de noviembre de 2010 «se iniciaron investigaciones seguidas por el Grupo del Servicio de Protección de la Naturaleza, equipo Seprona de León, llegándose al conocimiento de que al menos desde esas fechas los acusados venían realizando una serie de conductas en relación con productos cárnicos que ocasionaban un grave riesgo para el consumo humano».

El principal condenado es el propietario de una empresa cárnica de San Andrés del Rabanedo, «que venía dedicándose en dicho lugar al sacrificio de ganado ovino que hacía sin contar para ello con la pertinente autorización administrativa y sin observar las mínimas garantías de salubridad, vendiendo dicha carne para consumo público. Para aparentar que dicha carne había cumplido con todos los requisitos legales y sanitarios necesarios, utilizaba un sello que imitaba el sello oficial del matadero de León, aparentando que el ganado había sido objeto de sacrifico en dicho matadero, sellando la carne con el mismo».

SIN GARANTÍA SANITARIA

«Del mismo modo, venía dedicándose a la distribución de carne de animales destinada al consumo humano, a sabiendas de que carecía de las mínimas garantías sanitarias como el etiquetado y caducidad», explica el juez en su sentencia. Se le impone una pena de once meses de prisión, conmutada por una multa de 4.000 euros. El segundo condenado regentaba una empresa cárnica y ya había sido condenado por delitos similares en el Juzgado de lo Penal número 1 de los de Zamora y por quebrantamiento de condena. Se había establecido en San Andrés del Rabanedo y venía dedicándose a distribuir carne de distinta naturaleza, «a sabiendas de que carecía de las mínimas garantías sanitarias como el citado registro sanitario, etiquetado y caducidad, colaborando asimismo en la carnicería y en el matadero clandestino propiedad del principal investigado, distribuyendo los animales sacrificados en dicho lugar». También se le impone una multa de 4.000 euros.

El gerente de una empresa de cecinas de la provincia «distribuía carne y embutido de distinta naturaleza a sabiendas de que carecía de todo control sanitario así como productos caducados para consumo público. El 21 de enero de 2011 se efectuó una inspección en las instalaciones de la empresa donde el acusado tenía almacenada carne de animales y embutidos destinada al consumo humano, careciendo de las mínimas garantías sanitarias como el etiquetado y la caducidad, procediéndose a su decomiso, siendo la mercancía incautada 2.848 kilos». Su multa será de 1.800 euros. Es la misma que se impone al resto de los procesados.

Excepcionalmente, en uno de los casos, se reduce la multa a 900 euros, en virtud de una minimización de los días de multa (seis meses) y de la cantidad que se fija por cada uno de esos días (cinco euros).

La sentencia no admite recurso para los ocho condenados que aceptaron de conformidad pero permite al noveno apelar ante la Audiencia Provincial de León.