Sumario Semana del 22 al 28 de Abril de 2024. Edición 17.

Economía - Sostenibilidad

Fuente: UCACYL-VA / Norte de Castilla 10 de Agosto de 2015

La nueva batalla del IVA se centra en los tipos reducidos.

El IVA vuelve a estar en el centro de la polÃ©mica. Y es que los tambores sobre otra subida resuenan de nuevo desde algunos organismos. El primero en retomar este discurso, una constante en las recomendaciones internacionales desde el inicio de la crisis que se habÃa aparcado en los Ãºltimos meses, fue el FMI. En su Ãºltimo informe sobre EspaÃ±a, el Fondo Monetario Internacional pidiÃ³ un mayor Â«esfuerzo fiscalÂ», con una Â«reducciÃ³n gradual de los tratamientos preferenciales del IVAÂ».

El Banco de EspaÃ±a se sumÃ³ poco despuÃ©s a esa tesis al defender Â«la ampliaciÃ³n de las bases del IVAÂ». En ambos casos el mensaje es el mismo: eliminar o trasladar mÃ¡s productos del tipo superreducido (4%) y reducido (10%) al gravamen general (21%). Ambas instituciones justificaron la propuesta para corregir los posibles desvÃos en la senda de consolidaciÃ³n. Sin embargo, el mar de fondo tiene que ver con lo que declarÃ³ el jefe del equipo del FMI, Helge Berger: Â«La tendencia general es a eliminar tipos reducidosÂ». Â¿Es entonces una excepciÃ³n el IVA espaÃ±ol respecto a Europa?
El Impuesto sobre el Valor AÃ±adido (IVA) estÃ¡ armonizado en la UE desde 1993, es decir, se aplica de manera similar en todos los socios y con reglas comunes. Pero eso no implica gravÃ¡menes iguales. La directiva estableciÃ³ que el tipo general fuese como mÃnimo del 15% y que existiese un tipo reducido para casos especiales, no inferior al 5%.
Se aceptÃ³, ademÃ¡s, un tercer nivel -el superreducido- para los paÃses que tenÃan este gravamen antes de la armonizaciÃ³n y que afectaba a productos de primera necesidad. Fue el caso de EspaÃ±a, donde productos como el pan, la leche, los huevos, la fruta o las verduras, asÃ como los libros, los medicamentos o las sillas de ruedas, entre otros paÃses, poseen este tipo mÃ¡s beneficioso. Pero no es el Ãºnico que lo tiene.
Todos los estados de la UE cuentan con un tipo de IVA general y otro reducido, salvo Dinamarca, que cuenta con un gravamen Ãºnico del 25%, segÃºn Eurostat. La UE considera que el tipo superreducido debe ser inferior al 5%, pues de lo contrario computarÃa como reducido segÃºn la directiva. SÃ³lo hay cinco socios que cuentan con un gravamen inferior. Son EspaÃ±a (4%), Irlanda (4,8%), Francia (2,1%), Italia (4%) y Luxemburgo (3%). Sin embargo, hay otros doce paÃses que tambiÃ©n diferencian tres niveles de IVA, aunque su tipo mÃ¡s reducido sÃ supera el 5%. Es decir, menos de la mitad de los miembros comunitarios (once de 28) tienen solo dos niveles de IVA.
Igualar por arriba
Â«Hay una tendencia general a igualar el tipo general porque reduce la conflictividad de la aplicaciÃ³n normativaÂ», afirma ValentÃn Pich, presidente del Reaf-Regaf Colegio General de Economistas. Este experto sostiene que el IVA de EspaÃ±a puede estar en la media de la UE, pero recuerda que en comparaciÃ³n con paÃses como EE UU o JapÃ³n Â«es muy altoÂ». AdemÃ¡s, advierte de que una medida aislada, como serÃa aumentar su tributaciÃ³n, no soluciona los problemas estructurales de la economÃa. Â«No puede ser que cada vez que haya un problema se decida subir los impuestos. Hay que ver cuÃ¡l es la situaciÃ³n globalÂ», apunta. Y es que las recomendaciones de subir el IVA no son nuevas. El FMI y la ComisiÃ³n Europea vienen insistiendo en esta medida como fÃ³rmula para mejorar los ingresos y combatir tanto el elevado dÃ©ficit como la ascendente deuda pÃºblica.
A pesar de las reticencias iniciales, los distintos gobiernos acabaron aplicando sus recetas. AsÃ, el Ejecutivo de JosÃ© Luis RodrÃguez Zapatero elevÃ³ en 2010 el tipo general del 16 al 18% y el reducido del 7 al 8%.
Mariano Rajoy tambiÃ©n hizo lo propio a pesar de la negativa del ministro de Hacienda, CristÃ³bal Montoro, y aumentÃ³ hasta el 21% el tipo general -la media comunitaria estÃ¡ en el 21,5%- y al 10% el reducido. En este caso, la subida fue aÃºn mÃ¡s dura porque algunos productos pasaron directamente del gravamen reducido al general como, por ejemplo, el cine. Por si fuera poco, EspaÃ±a tuvo que subir el aÃ±o pasado el IVA de los productos sanitarios al tipo general obligado por una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE que consideraba que su tipo reducido era contrario a la norma comunitaria.
Ahora, tras la Ãºltima andanada de los organismos internacionales, el Ejecutivo vuelve a negar la mayor. Â«Tenemos nuestra propia hoja de rutaÂ», insisten en pÃºblico y en privado sus miembros. Y es que en Moncloa no quieren abrir ese debate antes de las elecciones, como tampoco han vuelto a hablar de las esperadas rebajas del IVA para el cine y otros productos culturales, y tambiÃ©n para las peluquerÃas.Parece poco probable que en la presentaciÃ³n de los Presupuestos Generales del Estado, este martes en el Congreso, Hacienda dÃ© pistas al respecto. Montoro, eso sÃ, argumentarÃ¡ que la recaudaciÃ³n por IVA sigue mejorando: en los primeros cuatro meses del aÃ±o creciÃ³ un 5,8%. Por eso, su conclusiÃ³n serÃ¡ que una nueva subida podrÃa ser contraproducente al retraer el consumo. Ahora bien, pasar de ahÃ a hablar de bajadas ya serÃ¡ harina de otro costal.